El 1 de septiembre se celebra el Día del árbol en el Perú. Una fecha que sirve para unir esfuerzos en la protección y respeto del medio ambiente, pero también para tomar conciencia sobre la importancia que tienen los árboles de los bosques amazónicos.

Gracias a la alianza, que desde el año 2022 mantienen la Fundación BBVA y la organización ARBIO Perú, es posible la conservación de 100 hectáreas en una zona protegida en la cuenca del río Las Piedras, en la provincia de Tambopata, Madre de Dios, que abarca un total de mil hectáreas.

Dicha concesión cuenta con el reconocimiento de “Ecosistema Frágil”, clasificación otorgada por el Servicio Forestal, SERFOR, a aquellas áreas de alto valor de conservación que brindan servicios ecos sistémicos para beneficio de todos y que cuentan con una gran riqueza de especies silvestres, donde se encuentran especies amenazadas y endémicas.

Sembrar es bueno, preservar es mejor

Si bien es cierto que las campañas que promueven la plantación de árboles son encomiables, lo cierto es que la subsistencia de los más jóvenes siempre dependerá de los viejos árboles que durante siglos se han mantenido como eje vital de los ecosistemas que se desarrollan en su entorno.

Los árboles antiguos actúan como centros energéticos para las plantas más jóvenes que crecen a su alrededor. Proveen información, nutrientes y minerales, ya sea a una planta enferma o a un retoño recién germinado que requiere de luz y alimento. Esta transferencia es posible gracias a una red subterránea de raíces y hongos interconectados, a través de la cual los árboles viejos transmiten estos recursos esenciales a las demás plantas del entorno.

Aire de todos

Una de las formas para combatir la depredación de los bosques amazónicos consiste en evitar comprar madera proveniente de árboles centenarios. Otra forma se sumarse a la defensa del medio ambiente es respaldar las investigaciones científicas que organizaciones como ARBIO Perú realizan en las zonas protegidas.

Cabe recordar que el 60% del territorio peruano es Amazonía, por lo que conviene informarse sobre las actividades destinadas a fortalecer su conservación y sostenimiento, pues de ello depende no solo la viabilidad del Perú como nación, sino la supervivencia del planeta entero.

De nada servirá la extracción ilegal maderera en una tierra sin agua para beber ni aire para respirar. Y eso es lo que los árboles centenarios proveen: aire limpio, agua fresca y tierra sana sobre la cual prosperar.

El futuro es verde

La actual crisis climática demanda acciones concretas en contra de la destrucción de la naturaleza. Al unir esfuerzos para garantizar un desarrollo sostenible lo que se consigue es asegurar el futuro del planeta. Y en esta cruzada la organización ARBIO Perú mantiene aliados corporativos como la Fundación BBVA, comprometida con el desarrollo sostenible del país.

El 1 de septiembre, Día del árbol, es una fecha que sirve para unir esfuerzos y empezar por lo inmediato: nuestros barrios y parques. Pero también para dar un paso más y aliarnos en la conservación de la selva amazónica.

Generar mayor conciencia sobre la importancia de preservar la naturaleza es una labor vital para el desarrollo sostenible del Perú y del planeta entero. Por esa razón la Fundación BBVA se suma a los esfuerzos de ARBIO Perú por construir un futuro viable para todos.