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Mariana de Althaus
Dramaturga

Publicado el 9 de agosto del 2018

Mariana de Althaus
Dramaturga

Publicado el 9 de agosto del 2018

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Hace cinco años que se creó Sala de Parto, quizás el mayor fertilizante que ha recibido el teatro peruano en los últimos tiempos, y este año nuestro festival de dramaturgia apuesta sobre todo por una potente oferta de obras peruanas, algo así como un pequeño muestrario de las mejores obras escritas por dramaturgos peruanos de los últimos años.

Para los que les gusta el teatro testimonial, están “San Bartolo” y “Ñaña”, de Jano Clavier y Claudia Tangoa. La primera es una estremecedora obra testimonial sobre los abusos del Sodalicio que ya lleva varias semanas de exitosas funciones, y la segunda es una obra multidisciplinaria sobre violencia familiar basada en un testimonio real de una joven de la selva que sufrió abusos físicos y psicológicos desde muy niña. También en la onda testimonial, aunque con un estilo clown, ligero y adorable, también se presenta la aclamadísima “Cuerda”, de Wendy Ramos. Esta obra aprovecha el festival para despedirse definitivamente, luego de decenas de funciones acá y en el extranjero. Desde Huancayo viene “Mades Medus” de Maria Teresa Zúñiga, una obra que se aleja del código realista para introducir al espectador a universo poético en el que dos comediantes esperan al público en una carpa de circo. “Los regalos” de la Compañía de Teatro Físico cuenta sin palabras y con una sofisticada dramaturgia corporal la relación de un padre con sus hijos. También vamos a poder ver otra vez “Astronautas” de Jorge Castro, una original obra que trabaja bajo una premisa delirante: la supuesta misión del gobierno de Velazco de mandar tres astronautas peruanos a la Luna. Esta obra se estrenó hace seis años y este año se reestrenó con salas llenas en el Teatro del Centro Cultural de la Universidad del Pacífico. También podremos volver a ver “Savia” de Luis Alberto León, una obra poderosa y terrible que pone a arder el tema del racismo en un impecable montaje de Chela de Ferrari. En las producciones internacionales tenemos “Feos”, del brillante dramaturgo chileno Guillermo Calderón (basado en el cuento “La noche de los feos” de Mario Benedetti), que mediante el uso de marionetas cuenta la historia de una mujer y un hombre deformes que se encuentran en la oscuridad de una sala de cine.

También vamos a poder ver otra vez “Astronautas” de Jorge Castro, una original obra que trabaja bajo una premisa delirante: la supuesta misión del gobierno de Velazco de mandar tres astronautas peruanos a la Luna.

Los que les gusta la cosa más espectacular tienen que ir a ver la argentina “Un poyo rojo” en el Teatro Pirandello, que se anuncia como “un interesante cruce entre danza, deporte y la sexualidad”. Y por último, la compañía alemana Rimini Protokoll trae el interesante proyecto “Remote Lima”, en el que un grupo de 50 personas se sumerge en la ciudad portando un par de audífonos, guiados por una voz sintética para vivir una experiencia muy especial. Y como cada año, aparte de las obras, Sala de Parto presenta lecturas dramáticas de las últimas ganadoras del concurso, dirigidas por experimentados directores locales. Esta vez se leerán “La Terapeuta” de Gabriela Yepes, “Los elefantes” de Ronnie Farfán, “Seguir” de Paris Pesantes, “Sadhaka” de Luis Alberto y Enrique León, e “Itaca” de Gonzalo Benavente. Las entradas ya están a la venta en Teleticket y se están acabando. Vamos a ver buen teatro, pero sobre todo vamos a ver nuestras propias historias.

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