Fundación BBVA Perú
Publicado el 28 de junio del 2023
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El jueves 29 de junio se celebra en el mundo la Solemnidad de San Pedro y San Pablo. Pero es también es el día que nuestro país honra a sus pescadores y a su héroe máximo: el prócer de la independencia, José Olaya Balandra.

Según la agencia católica de noticias ACI Prensa, la Solemnidad de San Pedro y San Pablo es una fecha santa consagrada a los santos pilares de la iglesia. A aquellos que fueron sus organizadores y que sufrieron persecución y martirio. Por esta razón, en la solemnidad de hoy, también se celebra el Día del Papa.

Columnas de fe

San Pedro y San Pablo son los primeros líderes del cristianismo. El primero de ellos, como apóstol y luego, designado por el propio Jesús, como su vicario en la Tierra: “Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia” (Mt 16, 18). Pablo, en cambio era un perseguidor de cristianos, conocido como Saulo de Tarso, quien luego de su conversión dedicó su vida a predicar el evangelio.

Ambos fueron condenados por su fe. Pedro en el año 64, prisionero en Mamertina, conocida como el Tullianum del antiguo foro romano, se negó a morir igual que Jesús y pidió ser crucificado de cabeza. Sus restos fueron sepultados en la colina del Vaticano donde hoy se levanta la Basílica de San Pedro.

San Pablo, también confinado en Mamertina, fue decapitado en el año 67 y enterrado donde hoy se levanta la Basílica de San Pablo de Extramuros.

Un mártir peruano

La celebración religiosa fue el punto de partida para honrar el primer oficio de San Pedro: pescador. En Lima concentra sus fiestas en el Callao y Chorrillos. Una tradición que, pese al paso de los años, se mantiene inalterable entre los rudos hombres de mar.

Así, el 29 de junio de 1823, mientras en Chorrillos se celebraba el día del pescador; en el centro de Lima, en el callejón de Petateros, a unos pasos de la Plaza de Armas de Lima, un pelotón de fusilamiento ejecutaba al pescador chorrillano llamado José Olaya Balandra.

De extracción humilde, pero ardorosamente ganado a la causa libertadora, Olaya utilizó su condición de pescador para trasladar comunicaciones entre los patriotas de Lima y el Callao. Estando Lima tomada por los realistas, fue capturado en la Calle de la Acequia Alta (cuadra 5 del jirón Cailloma) el 27 de junio de 1823.

Vejado y torturado, Olaya jamás se doblegó y a él se le atribuye una frase que hoy refulge en bronce: “Si mil vidas tuviera, gustoso las daría antes de traicionar a mi patria”.

Tras dos días de martirio fue condenado a muerte y fusilado en el pasaje que hoy lleva su nombre y donde se levanta un monumento.

El patrón del mar

Desde entonces todos los 29 de junio en Chorrillos, los pescadores reservan una oración para su mártir José Olaya. Mientras uno de los botes sale del puerto con la imagen del santo patrono San Pedro a bordo y recorre las aguas para augurar una buena pesca y un retorno feliz al hogar durante todo el año.

La pesca es símbolo y patrimonio del Perú. Actividad económica que se remonta a los albores del antiguo Perú y que se mantiene hasta nuestros días como una de las principales industrias que sostienen el bienestar de millones de hogares en todo el país.

La Fundación BBVA, comprometida con el fomento de la educación y la cultura, como parte del desarrollo sostenible del país, saluda a los pescadores en su día, que se celebra junto a la Solemnidad de San Pedro y San Pablo cada 29 de junio.

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