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Ha muerto uno de los genios mayores de la música y también del cine. La gloria y fama de Ennio Morricone se deben a la infinidad de bandas sonoras que compuso a lo largo de su vida, ya sea para largometrajes de los años 60 como para clásicos contemporáneos.
Conoció la celebridad con los spaghetti western de los años 60, con títulos como “Por un puñado de dólares” (1964), “El bueno, el malo y el feo” (1966) y “Érase una vez el oeste” (1968). Años más tarde trabajaría para las bandas sonoras de “Novecento” (1976), “La Misión” (1986) y “Cinema Paradiso” (1988).
Un referente cultural
Con Morricone la música era un protagonista y su relevancia iba más allá del mero acompañamiento. Realzaba emociones, sentimientos y añadía el dramatismo que una escena requería. Nada de lo que anida en el corazón del espectador hubiera sido igual sin él.
Desde entonces Morricone se ha convertido en un referente cultural. Por ejemplo, el documental “Sad Hill” (2017) peregrina hasta el cementerio de Almería en España, donde se rodó una de las escenas de “El bueno, el malo y el feo”. El grupo de rock Metallica inicia cada uno de sus conciertos utilizando piezas del maestro.
Historia del genio
Ennio Morricone nació en Roma el 10 de noviembre de 1928. Estudió música en el Conservatorio de Santa Cecilia donde se diplomó en composición, trompeta y canto coral. Sus primeros trabajos fueron como compositor de música sinfónica y de cámara.
También para agenciarse los primeros recursos trabajaba como arreglista de cantantes de música ligera como Johnny Fontana Gianni Morandi. Su primer trabajo para el cine no fue con Sergio Leone sino con el director Luciano Salcio para quien compuso la música de “El Federal” (1961).
Curiosamente Morricone y Leone se habían conocido en el colegio siendo niños, aunque ninguno lo recordase cuando formaron una alianza imbatible en la musicalización de clásicos imborrables como “Por un puñado de dólares” (1964), “El bueno, el malo y el feo” (1966), “Érase una vez el oeste” (1968) o “Agáchate, maldito” (1971).
Desde entonces Morricone trascendió las cintas de vaqueros y alcanzó a los más célebres realizadores. No hay director de prestigio que no haya trabajado con él: Pier Paolo Pasolini, Lina Wertmuller, Oliver Stone, Luis Buñuel, Pedro Almodóvar, Giuseppe Tornatore, Bernardo Bertolucci y un larguísimo etcétera.
La pasión de Tarantino
Pero el Oscar siempre le fue esquivo, hasta que en 2007, a modo de resarcimiento, la Academia le confirió un reconocimiento honorífico. Sin embargo, un gran fanático suyo, el director Quentin Tarantino se encargaría de reivindicarlo de un modo más justo.
Tarantino ya había utilizado música de Morricone en “Kill Bill” (2003), por lo que en 2016 le propuso trabajar juntos en la banda sonora de “Los ocho más odiados”. Música por la que el maestro no sólo fue nominado nuevamente en la categoría de Mejor banda sonora, sino que además se alzó con el premio dentro de la competencia.
La hora del adiós
La salud de Ennio Morricone a sus 91 años era sumamente frágil. Tras sufrir una caída, el compositor se rompió una pierna por lo que fue internado. Para la madrugada del lunes, se hizo público su deceso.
Dejó una despedida para sus seres queridos y admiradores. Del mismo modo, se supo que por pedido suyo, los funerales se realizaran en estricto privado.
Parte de su despedida, hecha pública por sus familiares, dice:
“Yo, Ennio Morricone, he muerto. Lo anuncio así a todos los amigos que siempre me fueron cercanos y también a esos un poco lejanos que despido con gran afecto”.
“Hay sólo una razón que me empuja a despedirme de este modo y a tener un funeral privado: no quiero molestar”.
“Quiero recordar con amor a mis hermanas Adriana, María y Franca y sus seres queridos y hacerles saber cuánto las quise.
Un saludo lleno, intenso, profundo a mis hijos Marco, Alessandra, Andrea y Giovanni, mi nuera Mónica y a mis nietos, Francesca, Valentina, Francesco y Luca.
Espero que entiendan cuánto los he amado.
Por último María (pero no última). A ella renuevo el amor extraordinario que nos ha mantenido juntos y que lamento abandonar.
A ella es mi más doloroso adiós.”
El pesar
De inmediato las autoridades de su país expresaron su dolor. El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, tuiteó: “Siempre recordaremos con infinita gratitud el genio artístico del Maestro Ennio Morricone. Nos hizo soñar, movernos, reflexionar, escribir notas memorables que serán inolvidables en la historia de la música y el cine”.
Por su parte, la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, expresó: “Dolor por la muerte de Ennio Morricone, gran músico y compositor de nuestro tiempo. Sus bandas sonoras han marcado la historia del cine, en Italia y en todo el mundo, y nos seguirán conmoviendo. Roma era su ciudad y hoy llora la pérdida de un artista muy querido”
Ennio Morricone murió a la edad de 91 años. Con él parte una historia importante no sólo de la música sino también del cine, para el que compuso más de 400 bandas sonoras. Un hermoso y legendario capítulo en la historia de la cultura de nuestro tiempo se ha cerrado con su partida.