Fotografía: USI

El 17 de setiembre de 1822 se inauguró la Biblioteca Nacional del Perú, institución tutelar del patrimonio bibliográfico y cultural del país. Desde entonces desarrolla una indesmayable labor por acercar a los peruanos a los libros y, a través de ellos, a un futuro mejor.

Uno de los primeros actos del general don José de San Martín como Protector del Perú fue firmar el decreto de creación de la Biblioteca Nacional el 28 de agosto de 1821. Una empresa, que a decir del libertador, auguraba mayor ventura a la causa de las naciones americanas.

La biblioteca se erigió en lo que había sido el Colegio Máximo de San Pablo fundado en 1568, y donde en 1584 se instaló también la imprenta de Antonio Ricardo. En esta misma sede funcionó en 1616 la Escuela de Caciques, llamada después, en 1767, Colegio de los Príncipes.

De hecho, al momento de su inauguración en 1822, parte de la colección de la novísima biblioteca provenía de la biblioteca jesuita del colegio San Pablo. Otra parte procedía de las generosas donaciones, de los cuales 600 volúmenes fueron obsequiados por el propio general San Martín.

Con una colección 11,256 títulos se inauguró la Biblioteca Nacional del Perú, que tuvo en el clérigo arequipeño y notable constituyente, don Mariano José de Arce, a su primer director. Desde entonces la noble tarea de preservar y difundir el conocimiento se mantiene.

Juntos por los libros

La Fundación BBVA, comulgando con el espíritu emancipador del general San Martín, entiende también que a mayor cultura, mayores oportunidades. Por esa razón mantiene convenios de cooperación con la Biblioteca Nacional del Perú.

En la actualidad existe un convenio marco de cooperación institucional entre la Fundación BBVA y la BNP. Un acuerdo cuyo propósito es fortalecer los esfuerzos hacia un objetivo común: la promoción de la lectura entre todos los peruanos, en especial entre los más pequeños. 

Este convenio además, compromete a ambas instituciones a sumar esfuerzos en la realización de actividades de gestión cultural. Una de ellas ha sido la realización de talleres dirigidos a los padres y sus habilidades para fomentar la lectura entre los niños.

Una experiencia que capacitó a los colaboradores del programa de voluntariado del BBVA como instructores en estas sesiones llamadas “Había una vez”. Estas se llevaron a cabo el año pasado en la sede histórica de la Biblioteca Pública de Lima de la avenida Abancay.

Una historia de valor

La tarea no ha sido fácil. Las vicisitudes de la vida nacional han conducido a la BNP a episodios dramáticos que complicaron su existencia. Ya entre los años 1823 y 1824, las refriegas con los remanentes realistas que ocuparon Lima lastimaron su colección.

Otros momentos aciagos se vivieron durante la ocupación chilena en 1881, cuando las tropas vencedoras de la Guerra del Pacífico convirtieron a la biblioteca en caballeriza y escenario de saqueos cuyos efectos todavía reverberan.

Finalizada la guerra le cupo a don Ricardo Palma refundar la biblioteca, la cual se reabre a partir de 1884, tras una paciente labor de recuperación de libros y solicitudes de donaciones que le valieron al tradicionalista el apelativo de Bibliotecario mendigo.

Palma se mantuvo en el cargo de director hasta 1912, año en el que fue relevado por don Manuel González Prada, lo que sirvió también para desatar una encarnizada polémica entre estas dos figuras totémicas de la cultura peruana.

Nuevos tiempos

Pero no sería hasta el 10 de mayo de 1943 que la BNP viviría su más terrible jornada, cuando sus instalaciones fueron presa de las llamas en un trágico incendio que redujo a cenizas gran parte del tesoro bibliográfico de la nación.

Esta vez le correspondió al historiador Jorge Basadre la refundación de la nueva Biblioteca, cuyo edificio levantado es la actual Biblioteca Pública de Lima. La moderna sede que funciona en la actualidad en San Borja fue inaugurada recién en el año 2006.

Desde entonces se ha desarrollado una labor de recuperación de libros, tanto secuestrados durante la ocupación chilena, así como de volúmenes sustraídos ilegalmente de su colección. En la actualidad está a la espera de superar la pandemia para reabrir totalmente sus puertas.

La Biblioteca Nacional cumple 198 años de infatigable labor. Una entidad tutelar de la cultura del país, con la que Fundación BBVA mantiene un convenio de esfuerzo mutuo de llevar lectura y educación a más peruanos, en especial a los más chicos.